El
reto era despertar en los escolares gallegos la habilidad para disfrutar
y analizar la complejidad de sus paisajes.
Para ello diseñamos
una exposición fácilmente transportable, hecha para
captar la atención de un grupo amplio de escolares.
Además,
una unidad didáctica ayudaba a profesores y estudiantes a desarrollar
los conceptos de mayor relevancia. |